Las playas de Garrobillo
De las películas antiguas, rememoramos en muchas ocasiones los paisajes idílicos de playas y montes de la España de entonces. Parecían tener un color y una salud especial, como la de la vida misma. Siempre había una escena en que un joven, buscando remanso a la orilla de la playa, encontraba a la quinceañera remolona leyendo de manera sensual un libro a los pies de las olas.
Este tipo de apariciones y encuentros resultan a día de hoy algo más que improbables. Lo mejor que puedes encontrar al atravesar unos cuantos matorrales, es alguna familia dominguera ocupando el mínimo espacio que resta de entre un centenar de sombrillas. Por eso se admiran tanto las calas y recovecos de playas que aún tenemos a mano. En la costa aguileña, sin ir más lejos. Playas del Garrobillo, o 'Playas de Lorca', como también se las conoce.
El sonido, la luz, la brisa. Las palomas que anidan en los huecos del acantilado. Las hormigas que, a los pies de la montaña, trabajan y trabajan entre diminutas y coloridas piedras... Es un paisaje digno de conocer, aunque sea una vez en la vida, porque transmite unas vibraciones que se pueden captar sin demasiado esfuerzo.
El Garrobillo es una extensión de terreno entre Águilas y Mazarrón, hermoso por sus múltiples cultivos y sorprendente por las formas que las playas adquieren, por las calas que se pueden encontrar. Esta zona de la Región, según he estado observando en los documentos del Ayuntamiento de Águilas, se encuentra dentro del Plan de Ordenación del Territorio que se está preparando para llevar a cabo el proyecto de Marina de Cope, ya iniciado.
¿Hasta que punto se perderá o no este paisaje si se llega a realizar Marina de Cope?
¿Qué beneficios conlleva este proyecto?
¿Qué otras zonas verán alterada su condición dentro de los planes de ordenación?
Infinidad de papeleo por mirar...
Este tipo de apariciones y encuentros resultan a día de hoy algo más que improbables. Lo mejor que puedes encontrar al atravesar unos cuantos matorrales, es alguna familia dominguera ocupando el mínimo espacio que resta de entre un centenar de sombrillas. Por eso se admiran tanto las calas y recovecos de playas que aún tenemos a mano. En la costa aguileña, sin ir más lejos. Playas del Garrobillo, o 'Playas de Lorca', como también se las conoce.
El sonido, la luz, la brisa. Las palomas que anidan en los huecos del acantilado. Las hormigas que, a los pies de la montaña, trabajan y trabajan entre diminutas y coloridas piedras... Es un paisaje digno de conocer, aunque sea una vez en la vida, porque transmite unas vibraciones que se pueden captar sin demasiado esfuerzo.
El Garrobillo es una extensión de terreno entre Águilas y Mazarrón, hermoso por sus múltiples cultivos y sorprendente por las formas que las playas adquieren, por las calas que se pueden encontrar. Esta zona de la Región, según he estado observando en los documentos del Ayuntamiento de Águilas, se encuentra dentro del Plan de Ordenación del Territorio que se está preparando para llevar a cabo el proyecto de Marina de Cope, ya iniciado.
¿Hasta que punto se perderá o no este paisaje si se llega a realizar Marina de Cope?
¿Qué beneficios conlleva este proyecto?
¿Qué otras zonas verán alterada su condición dentro de los planes de ordenación?
Infinidad de papeleo por mirar...
Totalmente de acuerdo contigo chica de greenpeace. Se están cargando la costa, el país y todo lo que se menea. Habría que empezar a darle la vuelta a una tortilla que está chamuscada.
ResponderEliminarAl final, cada vez hay más casas en la costa y por tanto, menos playas. Y parece que no tiene remedio
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