Elecciones con premio

A lo largo de todo el día de hoy, “el programa de puntos de Rubalcaba” es una de las frases que más he ido leyendo tanto en tweets, noticias como comentarios. Algo que, en principio, me parecía simple campaña viral u otra de las metáforas que abundan por la red acerca de lo que tienen que hacer los políticos, sobre todo PPSOE, para conseguir votos de cara al 20-N y que, ¡oh, sorpresa!, resulta ser otra de las campañas de apoyo de (ahora) nuestro siempre estelar PSOE.

Conocedor de los entresijos de las más comprometidas y fructíferas campañas de comunicación online en EE.UU, el PSOE bien ha sabido aprovechar el tirón de las redes sociales y hacer buen uso de algo que gusta mucho en España: puntos, puntos y más puntos.

Ahora, junto a la cartilla de La Razón, las tarjetas de Cepsa, de la BP, la Travel y el azulado contrato con el Inem, habremos de llevar nuestra cartilla con R (de Rubalcaba), con la que podremos ganar tan sugerentes premios como un bálsamo labial, una taza térmica o un vaso térmico. Y todo, solo por el módico precio de hacerles buena propaganda compartiendo en redes sociales sus propuestas de cara a las elecciones de noviembre.

Hasta aquí bien, porque es gratis y es España. Aunque a mí tanto producto combatiente del frío me hace desconfiar de tan nobles intenciones, no vaya a ser que en realidad, lo que pasa es que vuelve a subir la luz, ante lo que luego dirán “bueno… yo ya aporté bálsamo labial y termos”. Y nosotros diremos “Claro, ¡y encima me sobraban 10 puntos!”