Pluralidad, democracia, soluciones...
Con expectación y cierta esperanza, me dispuse a ver cómo los líderes de las dos fuerzas políticas de este país (PPSOE) se sentaban uno frente a otro para, según anuncian, explicarnos a todos de qué manera piensan solucionar nuestros problemas de cara a las elecciones 2011. Lo esperado, una declarada exposición de motivos al más típico estilo de una elección de delegado de primaria. Pura democracia, aunque sea parcial al no estar representadas el resto de fuerzas que optan a las urnas el 20N.
Pero la esperanza se desvanece de forma fulminante después de los 20 primeros minutos de discurso aprendido entre PPSOE que, lejos de soluciones, lo único que parecen exponer es que "su opción, señor contrario, es peor que la mía". Y continúan con las tiradas de tiestos y los reproches del pasado, salpicando todo esto con algún anuncio de posibles medidas aterradoras cuya sustentación se basa en la repetición de monosílabos como "sí" o "no".
Insidias, dicen los candidatos, ante las repetidas acusaciones, mientras sus futuros votantes asistimos perplejos, algunos no, a tal pelea de gallos. Aunque lo peor, en todo caso, es que los realmente heridos aquí son los que asisten al espectáculo, cuya clausura protagonizan los gallos, abandonando el ruedo casi a hombros de sus beneficiarios.
Ahora hay que contestar aquello de "¿Quién gana?" mientras solo queda afirmar que "nosotros perdemos". Aunque quizás sea hora de abrir un poco más los ojos y empezar a pensar en más opciones, que además de haberlas, exponen claramente sus medidas:
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